¿Desechar o Reparar?

Me parece curioso, mi papá me acaba de mostrar en una página del mercurio del domingo una columna titulada así. Quizás, indirectamente me sugiere q a veces es necesario reparar y arrancar de esta cultura de hoy en día de que todo es desechable, bueno y la columna dice mas o menos así:

Recuerdo la plancha pesada y vieja de cordón negro que utilizaban en mi casa cuando yo era una niña, recuerdo que iba y venia de la casa del señor Villablanca, el encargado de repararla
Como no había otra, nos hacia enojar cada vez que fallaba, nos molestaban sus desperfectos, lamentábamos su ausencia, esperábamos su arreglo y finalmente celebrábamos su llegada.
Hoy en día si la plancha deja de funcionar, se bota a la basura y compramos una nueva, sin lamentar, sin pasar por enojos, y sin complicaciones. rápidamente se compra una nueva y asunto resuelto.
Pareciera que ya no tenemos tiempo para lamentar, buscar una forma de reparar y esperar el regreso, de nada ni de nadie.
EL problema es que no es solo la plancha, si no también los juguetes, los muebles, y LAS RELACIONES!

Esta es la nueva modalidad, no sufrir y reemplazar, incapaces de dar otro valor, o de reparar o de tratar de arreglar y solucionar. es mas fácil botar todo y vamos comprando y reemplazando, que triste es pensar que muchas veces lo hacemos así en las relaciones, que por que la persona que te acompaña se manda un condoro o no satisface ciertas necesidades simplemente decimos "hasta aqui no mas, lo siento" y vamos buscando un nuevo reemplazante, relaciones desechables, q a veces no tiene ningun sentido, rapidas, efimeras, y una tras otra, sin tomar el valor de construir juntos, de luchar de sufrir, de agarrarse de las mechas, de luchar por lo que se sueña, superando los obstaculos

Las convivencias humanas, para que perduren y podamos gozar los placares y ventajas de relaciones largas y profundas, tambien requieren tiempos para enojarse, lamentar, buscar caminos de solucion, trabajo y paciencia, de esta manera cuando se dañan pueden retomar su armonia y luego su tiempo para celebrarlo.


Ya he lamentado, sufrido, arrepentido, extrañado y añorado.